De taberna oscura irlandesa a un colorido local de cocina callejera con gran oferta de cervezas. Así ha sido la transición de Buddy and Beer, un pub irlandés situado en el barrio de Prosperidad.
Porque hay una cosa que está quedando clara en la capital, y es que no solo el peso de la oferta gastronómica está en Madrid centro, sino que se está expandiendo a barrios periféricos para que nos tengamos que mover un poquito si queremos probar diferentes cosas.
Estos chicos han sabido darle una vuelta a su concepto de 360º quedando mucho más rompedor y llamativo y, además, apostando por los sabores exóticos y adaptado a nuestros paladares. Se han pintado antiguas maderas antiguas y tristes en maderas blancas y amarillas. Las paredes son muy coloridas y con guiños muy divertidos. Y sí, aquí se come bien y se tiran rubias de barril.
Nada más sentarte te ofrecen la carta o el menú y una carta de cervezas artesanales que pueden maridarse con cualquiera de sus platos. Es más, hay tips y consejos para saber qué cerveza queda mejor con los platos que has pedido. Y esto nos parece muy guay.
PLATO A PLATO.
Cómo no, optamos por el ceviche de corvina en leche de tigre hindú con maíz crujiente y batata. Ah, y para acompañar… ¡Yuca! Lo que más nos gustó es el espesor de la leche de tigre.
Los bocaditos de atún sobre arroz crujiente nos encantaron. Otra forma de comer «sushi». Lo más sorprendente es que, aunque estuvieran rebozados, el arroz de sushi mantenía muchísimo su sabor. El ceviche y esto, lo más recomendado.
Fans de los pan baos, seguimos con el pan bao de butifarra. El pan, como siempre, estupendo. Quizá nos faltaba un poco más de relleno, pero el sabor era muy bueno.
Foto Le Cool
Fuertecito seguimos con las costillas koreanas asadas a 80º durante 12 horas. Me recordaron un poco a las de Kitchen 154, aunque estas eran más suaves.
El dombury tonkatsu con arroz jazmín, papada empanada y salsa oriental es para los atrevidos. Costó que me convencieran simplemente por la palabra «papada», pero al final caí. No os preocupéis, es como comer pollo empanado, simplemente es más gelatinosa.
Por si no fuera suficiente, pedimos un clásico de Buddy and Beer que ya estaba en su carta: la tarta de queso con flambeado de tequila y ralladura de lima. ¡No os paséis con el tequila! Es todo un acierto y la tarta está esponjosa.
¿Y cómo andan de precio? Pues lo más caro son las costillas que únicamente cuestan 12€ 😉
Dirección: calle Pradillo 30
Puntuación: 4 / 5
Precio medio: 15€/ persona
Web de Buddy and Beer.
Hacer Comentario