La milla de oro gastronómica en la que se convirtió hace unos años el barrio de El Retiro tiene, desde 2016, un lugar de peregrinaje imprescindible. En muy poco tiempo, Taberna y Media se ha convertido en un nuevo clásico, un lugar de culto donde se cuida y se mima el producto por encima de todo. Es una taberna, pero también algo más.
Aquí se puede tapear, ponerse las botas con un cocido madrileño de dos vuelcos (solo de martes a viernes) o picar algo ligero, siempre, si el cliente lo desea, con una buena copa de vino. Porque además de la cocina, aquí también se cuida mucho la carta de vinos. Por algo el padre y abuelo del cocinero y propietario, José Luis Martínez, eran bodegueros.
José Luis es el típico dueño que cuida a sus clientes como si fueran de la familia, los saluda y se pasea por el restaurante, para comprobar que todo va viento en popa. Y eso que el local es estrecho y laberíntico, donde solo caben un máximo de 40 personas. Suficiente, vaya.
Aquí ya hay unos cuantos platos que todo el mundo debe probar, al menos una vez.
Es el caso de las bravas cremosas de Alejandro (11,50€) o los torreznos crujientes de Fuentidueña (8,25€ media ración y 12,50€ ración completa).
La carta cambia con mucha frecuencia, porque aquí manda la estacionalidad y la disponibilidad en el mercado. Así que quizá cuando vayas no tengan exactamente el plato así.
En nuestra visita probamos nuevos platos de carta, como milhojas de sardina con esponja de tomate (15,50€). Mejor pedírselo para uno solo, por delicioso y por difícil para compartir.
Seguimos con unas deliciosas alcachofas moradas de Alicante con sepia y salsa vasca (14,50€), servidas con la salsa verde que se suele cocinar con la merluza.
Lasaña de mejillones, portobellos y scamorza (14,50€).
Ventresca de bacalao al ajoarriero (19€).
Por último, secreto ibérico, verduras salteadas con jengibre, cilantro y arroz crujiente (18,50€).
De postre, si aún os queda hueco, no os perdáis la tarta de queso y vainilla de la taberna (6,50), nacida casi por error y ya es un clásico; o la torrija cremosa de anís con helado de vainilla (6,50€), que es muy ligera y no está frita.
Si aún dudáis entre tanta oferta como tiene el barrio, aquí podéis ir a tiro hecho. En serio.
Dirección: c/ Lope de Rueda, 30.
Precio medio: 30€.
Puntuación: 5/5
Web de Taberna y Media.
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